lunes, 24 de octubre de 2011

Herramientas Gerenciales de la Ética para los Negocios

Aplicación de una variable de Intensidad Moral

Al presente caso se le puede aplicar la variable de intensidad moral denominada Probabilidad del efecto, la cual consiste en calificar de “poco probable” que los daños derivados como consecuencia de las decisiones éticas tomadas por una persona (o, en este caso, por una organización) realmente ocurran. De la misma manera, con esta variable se corre el riesgo de asumir como sinónimos los términos “poco probable” e “imposible”, lo cual no necesariamente se cumple, pues al fin y al cabo, los efectos de las decisiones se pueden materializar.

En el caso que se está desarrollando, Wal-Mart, al ser una multinacional de gran poder y presencia en el mundo, piensa que su imagen de gran empresa exitosa de alguna manera la hace inmune a cualquier tipo de acusación que se le pueda imputar, más aún si proviene de un grupo con poca influencia en el medio (mujeres que acusan a la empresa de haberlas discriminado en sus centros de trabajo). Si bien el grupo de mujeres demandantes y el caso en sí mismo se convirtieron en una especie de símbolo estadounidense a favor de la lucha por los derechos laborales de la mujer (en el sentido de una búsqueda de trato igualitario en el trabajo con respecto a sus pares masculinos), esto no bastó para que Wal-Mart siquiera considerase al conjunto como una amenaza hacia sus intereses económicos. De esta manera, la multinacional se ve cegada por la variable “Probabilidad de efecto” en el instante que cree que es muy poco probable que esta acusación por discriminación de género dentro de sus sedes pueda causarle algún daño severo en su forma de hacer negocios y, mucho menos, en su imagen como empresa: si bien toma las acciones respectivas para defenderse judicialmente, termina por subestimar la situación.

Esta “falta de humildad” por parte de Wal-Mart, al pensar que es intocable, que los errores que pueda cometer al dirigirse como una entidad lucrativa son prácticamente nulos y que, por el contrario, sus operaciones traen progreso, no solo a la empresa misma, sino también a sus stakeholders (incluidas sus trabajadoras); podría provocar en algún momento que no prevenga una serie de verdaderos errores en su gestión, pues todo es perfecto en su interior, lo cual lleve a consecuencias negativas: si, más adelante, el grupo de mujeres, debido a su insistencia en el caso a pesar de la derrota inicial, terminaran por obtener victorias individuales suficientes (recordemos que la opción que les queda es realizar demandas individuales según la Corte Suprema estadounidense) como para ganar frente a la multinacional, Wal-Mart tendría que retractarse al respecto, indemnizar a cada una de ellas y, por supuesto, su imagen empresarial quedaría manchada y, por ende, sus logros económicos se verían afectados.

Problemas desde el punto de vista de la Teoría de la Justicia

Problema # 1:

En el entorno empresarial, siempre se da un conflicto de intereses entre los distintos stakeholders de una empresa. En el caso que estamos analizando, las seis mujeres que iniciaron la demanda consideraban, a criterio propio, que eran discriminadas. Así mismo, consideraban que existía un trato desigual en la promociones como en las remuneraciones con respecto a sus pares masculinos. Para que se puedan evidenciar procedimientos justos, como posiblemente lo haya hecho el juez que evaluó el caso, se debió evaluar trabajadores con similar (es):

- Posición en la estructura organizacional, implica equivalencia de funciones y responsabilidades.

- Serie de evaluaciones de desempeño realizadas, en las que se puede apreciar el compromiso y la capacidad con que se responde a las responsabilidades encargadas por la empresa en los resultados, así como se pueden comparar los indicadores de desempeño y demás.

Como consecuencia de esta primera evaluación, se debió analizar a trabajadores que, según las demandantes, habían sido promovidos “injustamente” y el salario de colaboradores con similares responsabilidades en la organización. Todo este análisis para corroborar la objetividad de las acusaciones que se hacían en contra de Wal-Mart. Solo después de este estudio se podría decir si existieron o no resultados justos para un determinado nivel de esfuerzo y compromiso para todos los colaboradores y si se están respetando los derechos a acceder a las mismas oportunidades dado un nivel de entrega a la compañía.


Problema # 2:

En otra parte del desarrollo de los acontecimientos del caso, se da un cambio de rumbo decisivo que permitió a Wal-Mart salir bien librado: el Tribunal Supremo de Estados Unidos rechazó la continuidad de la demanda colectiva que, en un principio fue aprobada por el juez federal de San Francisco.

Dentro del marco legal, se entiende que ambos jueces, tanto el supremo como el federal, hacen uso en un mismo procedimiento de evaluación a un determinado caso en específico. Es decir que aplican procedimientos justos y brindan iguales oportunidades para la solución de los conflictos de la ciudadanía, pero el dictamen del juez supremo predomina sobre el federal, porque se entiende que hace una reevaluación del caso y está en una instancia superior.

Entonces, se puede apreciar claramente que, en teoría, aplicando procedimientos justos, los resultados justos, no necesariamente serán “justos”, si entendemos que justo es a la misma evaluación, igual resultado. ¿Quién podría afirmar categóricamente que el juez federal se equivocó y que el supremo corrigió el error y su dictamen fue el justo? ¿Acaso la justicia es una ruleta rusa y no se basa en cuestiones objetivas que implican aplicar la mayor neutralidad en el conflicto y solo se limita a dar la razón a quien la parte que la tenga?

Finalmente, hubo un ganador y un perdedor en el conflicto y, al respecto, se puede decir existió colusión de intereses, fraude, negociaciones indebidas y demás; sin embargo, es la sociedad misma quién le ha encargado y dado la autoridad a un juez supremo para definir estas situaciones, confiando en su sano y neutral juicio, y decimos que se sentenció “justamente” y que el resultado fue justo. Es factible, e incuestionable, que bajo otras circunstancias el caso podría haber tenido un desenlace opuesto.

Análisis Utilitarista

En base a la Teoría Consecuencialista del Utilitarismo, la cual busca el interés y bienestar colectivo, se realizó el siguiente Análisis de Costo-Beneficio a partir de la decisión de Betty Dukes de demandar o no demandar:


Como resultado, de acuerdo al Utilitarismo, Betty Dukes no debió haber demandado a Wal-Mart, puesto que el mayor número de personas involucradas se verían perjudicadas, entre ellas, no solo la cadena multinacional de tiendas Wal-Mart, pues su imagen se vería afectada y perdería mucho dinero, sino que también sus demás compañeras de trabajo se vería afectadas, pues podrían verse amedrentadas por la empresa para que tampoco ellas se amotinen en su contra. De la misma manera, los accionistas y otros inversionistas de Wal-Mart, se verían afectados por la decisión de Betty Dukes, puesto que su reputación se vería afectada y perderían dinero y futuras oportunidades de negocios. Finalmente, los clientes -aunque sea en menor medida- e incluso la misma Betty Dukes se verían perjudicados por la decisión de demandar a Wal-Mart; los primeros, porque se sentirían decepcionados por la empresa y perderían la confianza en la misma y, Betty, porque perdería dinero y tiempo en todo el proceso y, principalmente, porque perdería su principal sustento económico, que es su trabajo, y tendría que sumergirse en la búsqueda de un nuevo empleo y todo lo que conlleva eso.

Cronología del caso

2001: Se presenta la demanda entablada por más de un millón de empleadas y ex empleadas de diferentes sucursales de Wal-Mart, la cual fue acusada de discriminación hacia las mujeres al no brindarles las mismas oportunidades de ascenso en línea de carrera y en aumentos de sueldo como a sus pares masculinos. El noveno circuito de apelaciones, en San Francisco (California), aceptó la demanda colectiva en abril de ese año y a partir de allí se estuvo esperando a que el Tribunal Supremo estadounidense tome una decisión sobre si aceptará o no que proceda la demanda colectiva.

6 Diciembre 2010: El Tribunal Supremo de los Estados Unidos acepta revisar la demanda colectiva para ver si procede o no finalmente. Respecto a esto, Wal-Mart se opone a que el Tribunal Supremo acepte el caso como una demanda colectiva e insiste en el hecho de que sus políticas prohíben la discriminación de todo tipo, lo que incluye la de género, y más bien promueven la diversidad en la conformación de su personal.
[1]

29 Marzo 2011: El Tribunal Supremo de Estados Unidos escucha los argumentos dentro de la demanda colectiva iniciada por mujeres trabajadoras y ex trabajadoras que sostienen que la cadena de tiendas Wal-Mart las discriminó laboralmente.[2]

20 Junio 2011: El Tribunal Supremo de Estados Unidos rechaza la demanda colectiva contra Wal-Mart. Es así que el caso se convierte en una victoria para la empresa derrumbando uno de los hechos judiciales actuales más representativos en la lucha contra la discriminación laboral en las multinacionales. La decisión se habría tomado a raíz de que los abogados de las demandantes no pudieron probar que existiese una política general en Wal-Mart que condujera a la discriminación por género.[3]

Las consecuencias de este hecho fuera de Wal-Mart son:

· El impedimento de impactar efectivamente en las políticas de compañías que discriminan a sus empleados por sexo, raza u otras razones, pues al ver la victoria de Wal-Mart se verían “justificadas” al realizar prácticas discriminatorias dentro de sus sedes.

· La no compensación e indemnización por miles de millones de dólares a las mujeres demandantes, quienes así han perdido tiempo y dinero frente al fallo de este caso.

· El optar, si así lo decidiesen las demandantes, por iniciar una querella individual contra Wal-Mart en desigualdad de condiciones, teniendo en cuenta los costos y recursos legales necesarios para estos casos.

Las consecuencias de este hecho dentro de Wal-Mart son:

· A pesar de su victoria, se generaría un clima laboral tenso, de inseguridad y lleno de rumores por parte de los empleados sobre la implicación de la empresa en un caso de discriminación hacia su propio personal.

· A pesar de su victoria, también se generaría una mala imagen de la empresa dentro de las mentes y corazones de sus clientes, muchos de los cuales seguramente no se sentirán muy a gusto al acudir a las sucursales de Wal-Mart, pues estarían “colaborando” con la discriminación laboral.

· La toma de conciencia de los dirigentes de la corporación, quienes investigarían más a fondo y tomarían las acciones respectivas respecto al origen de estas acusaciones dentro de sus sucursales. Buscarían así corregir las malas prácticas individuales de ciertos jefes frente a las trabajadoras que tienen a su cargo.

Luego de tener en cuenta todos los antecedentes del caso, sus consecuencias y el resultado final del mismo, podemos decir que las partes afectadas son:

· El grupo de demandantes, que han “invertido” tiempo y dinero en su demanda legal y no han logrado nada finalmente.

· Los empleados, tanto varones como mujeres que se encuentren aun laborando en Wal-Mart, son también afectados al pensar que se ha generado un ambiente hostil por discriminación dentro de la empresa.

· Aquellos clientes que no pasan por alto una situación de esta naturaleza y rápidamente relacionan a la empresa como sinónimo de malas prácticas laborales por discriminación (ya no irían a comprar a las sucursales de la empresa o no lo harían con gusto).

Por otro lado, se puede mencionar que los responsables de la generación de esta situación son:

· Los jefes, que pudieron haber amparado esta clase de prácticas discriminatorias dentro de las sucursales de Wal-Mart.

· Los gerentes de las sedes, al omitir el realizar una auditoría, ejerciendo así bien su función administrativa de control, para verificar malas prácticas laborales individuales y corregirlas a tiempo.

· Los accionistas, pues es muy seguro que no exigieron alguna especie de informe que, además de puntos financieros y operativos, contemplase la identificación de asuntos de desempeño de las prácticas laborales o también la detección de problemas entre los trabajadores de las sucursales.

[1] http://www.sandiegored.com/noticias/1314/El-Supremo-vera-el-mayor-caso-por-discriminacion-contra-Wal-Mart/

[2] http://www.sandiegored.com/noticias/8587/Tribunal-Supremo-de-EE-UU-escucha-hoy-los-argumentos-en-el-caso-contra-WalMart/

[3] http://www.sandiegored.com/noticias/13800/Supremo-de-EE-UU-da-la-victoria-a-Wal-Mart-en-caso-simbolico-de-discriminacion/